30 de abril 2012
Querida
Hermana Pily: he querido dedicarte estas palabras de despedida por tu partida y
sé que estas con Dios, nos has dejado,
pero nunca olvidaremos cuando pasabas por los salones con una cajita de cartón,
llena de ganchos, aretes, moños y balacas, cuando nos mirabas con ternura, sonreías y decías “esta te queda bien”, todas te queríamos comprar y escoger, los
lindos accesorios que con tus manos hacías con cariño para nosotras; y ahora
los ganchos, moños y aretes son el recuerdo que siempre permanecerá en nuestros
corazones.
Le
pido a Dios que nos de fortaleza para soportar tu perdida y a todos tus seres
queridos que les de sabiduría para aceptar tu despedida.
Nuestra
alegría y esperanza es saber que siempre estarás junto a nosotros en nuestro corazón
y que desde el cielo nos miraras con dulzura y amor.
Escribo
con hoja y lápiz para honrar tu recuerdo, te extrañamos Hna. Pily.
23
de abril de 2013
Hola
Hermana Pily, te escribo otra vez para recordar con tristeza tu partida hace un
año, aun te recordamos con dulzura. Dios nos da el tiempo para tomar fuerza,
para calmar la ausencia que nos haces, el
tiempo es largo pero aun así no olvidamos las personas que marcan nuestro corazón,
y tú eres una de esas, aunque hemos crecido y
ya no somos esas niñas picaras y alegres que tu visitabas en los salones
para ofrecernos los lindos accesorios que tu hacías, te recordamos y te
extrañamos, a veces te vemos caminar por los pasillos con tu pequeña caja; nos da mucha tristeza que esas pequeñas niñas
que ahora ocupan nuestros antiguos salones, no tengan la oportunidad de
conocerte, estoy segura que ellas también te habrían querido como nosotras, porque tu dulzura
que nos demostrabas a diario, nos llevó a amarte y cogerte cariño.
Te queremos
y extrañamos Hna. Pily.
Atte:
Angie Valentina Córdoba
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