¿Qué es un maestro?

Un maestro es una persona noble que hace el bien, se preocupa por la generación futura y por el bien de la humanidad. Pero un maestro no solo enseña e indica sino que da amor, da oportunidad, ofrece su conocimiento, es un ejemplo de persona ideal para  todos y enseña  con sensibilidad, devoción y amor porque con amor todo se puede. Un maestro en sentido general, es una persona a la que se le reconoce una habilidad extraordinaria en enseñar, además es alguien que ha estudiado y se encarga de la educación de los niños y niñas.

Para mí, un maestro es inteligente, interesante, comprometido, positivo, confiable y modesto. También informado y fácil de entender, que piensa con la mente pero también con el corazón.

Enseñar requiere conocimiento amplio de una materia, plan de estudio, entusiasmo, un deseo de hacer una diferencia en las vidas de los jóvenes, porque aunque no lo parezca eso es lo que hacen los buenos maestros,  también requiere una forma de ser cariñosa/o y un amor por el aprendizaje que no se debe quedar en pensamientos sino también se debe transmitir a los estudiantes, porque el amor a una materia trae dedicación en el estudio y cariño a las cosas nuevas; lo más preciado de la vida para nosotros es que todo con amor se vuelve más fácil y divertido, además el aprender y enseñar también.

En mi colegio hay muy buenos maestros, así son muchos: a ellos les da igual la inteligencia de una persona, lo que quieren es el bien de todos, valoran mucho más el esfuerzo, que la inteligencia y la nota en sí, porque para ellos el avance de un alumno “malo”, aunque sea poco, es muy bueno y demuestra que lo que ellos hacen no es en vano; pero también exigen disciplina en el estudio y dedicación, porque ellos no pueden permitir que los jóvenes no nos esforcemos en ser personas buenas e inteligentes pues “con la inteligencia no se nace, el esfuerzo y dedicación forman a una persona inteligente que lucha por el bien suyo y de los demás, además que siempre persevera para alcanzar sus metas y nunca se rinde”, esa debe ser la meta de todo maestro. Yo he tenido muchos maestros y mi desempeño académico no se debe a mi estudio ni a mi inteligencia sino al amor que me han hecho coger los maestros a la  materias por eso les doy las gracias; son muy pocas las instituciones que reconocen el preciado valor del elemento humano. La gran mayoría hace especial énfasis en el producto, los procedimientos, los procesos y las tareas y casi siempre se olvidan de lo más fundamental: el factor humano y es aquí como en toda institución educativa, son los profesores los pilares sobre los que se levantan los cimientos de la nueva sociedad la cual la conformamos todos los niños y niñas.

Son los Maestros los que al igual que los soldados, libran diariamente una fervorosa batalla en el campo de la educación.

Empuñan  valerosamente sus armas, los libros, apuntes, marcadores y libretas y arremeten contra el enemigo común: la ignorancia, la inmoralidad y la injusticia. Es por eso que los maestros, infatigablemente luchan día tras día, por tratar de cambiar esta retorcida sociedad.

De que les  sirve a los maestros enseñar siete horas en un aula de clases, compartiendo enseñanzas con sus alumnos, si con tan solo cinco minutos de mala televisión, internet, etc. se echan para atrás todos los valores que ellos nos inculcan.

Su lucha es una lucha desigual, es una batalla en desventaja para ellos. La gran mayoría de las veces los maestros luchan solos. Solos porque no cuentan con el apoyo de los padres de familia; a veces luchan con hambre, porque no tienen lo suficiente para comer o no tienen tiempo de hacerlo; a veces también luchan con sueño, porque se llevan parte de su  trabajo a sus  casas. Pero no les  importa, luchar solos, con hambre o con sueño, porque luchan contentos, porque luchan convencidos de que ser maestros tal vez no sea la profesión más lucrativa ni la menos laboriosa, pero es la profesión que escogen porque les gusta enseñar, porque aman lo que hacen, y hacen lo que aman, por eso les doy infinitas gracias a mis maestros y a todos los que se dedican a enseñar y a luchar por el bien de la humanidad, les deseo lo mejor y encomiendo en sus manos el futuro mío y de esta sociedad.

15 DE MAYO DE 2013 DIA DEL MAESTRO.

¡GRACIAS A TODOS LOS MAESTROS POR ENSEÑAR COMO ENSEÑAN Y FELIZ DIA DEL PROFESOR!

 

Por: ANGIE VALENTINA CÓRDOBA.