miércoles, 8 de octubre de 2014

Una sombra que no me pertenece.



22 de Septiembre  del 2014, Popayán, Cauca.

Descripción: http://img1.wikia.nocookie.net/__cb20110820152032/creepypasta/images/0/0b/Sombras.jpgUna sombra que no me pertenece.

Otro día de silencio, siendo expresiva sin poder expresarme. Entender todo pero no decir nada, generalmente es duro; pero ya estoy acostumbrada, Aun así es cruel, no conmigo sino con los demás, no poder contar a los otros cosas que los involucran.
Caminé despacio, arrastrándome entre los muros y desvaneciéndome en las ventanas. La soledad es muy pacifica, pero a veces cansa, por eso ir al colegio parque se había vuelto uno de mis pasatiempos favoritos, y pensar que antes lo odiaba.
Sé que se preguntaran cómo me volví una sombra, una mancha en este mundo de luz, no lo tengo muy claro pero algo que doy por seguro es que lo que soy me lo debo a mi misma, yo soy la causante de mi desgracia, fabrique mi soledad y construí mi silueta, ahora pago por las consecuencias.
Son recuerdos oscuros los que tengo de esa noche. Era la noche perfecta, llovía, aquella lluvia que constantemente ahogaba mis sollozos y se mezclaba con mis lágrimas, recuerdos de dolor. El día había sido normal, no tenía nada especial, no existían razones para que yo lo hiciera, no habían pruebas solo palabras que el viento se llevó y que la gente había olvidado, eras palabras vagas, sueltas, sin destinatario en concreto. Las recitaba para el mundo como poesía, sin embargo nadie se dio cuenta, no había culpable, la única responsable fui yo.
Mi vida no era complicada ni extravagante, era común, nada que hiciera correr mi adrenalina, no me podía quejar era una buena vida, pero estaba inconforme, perdida, me hacía falta algo, era imposible evitar ese vacío.
Antes solía sonreír, podía vivir con ello, aun así las cosas fueron cambiando hasta aquella noche, todo iba empeorando, mis fuerzas se desvanecieron y perdí el impulso que me hacía luchar. Todo sucedió muy rápido.
Descripción: http://pachecolandia.files.wordpress.com/2010/05/tristeza.jpg?w=500Dos palabras hicieron falta para transfórmame en lo que soy, la sombra de lo que fui, su muerte y después la de mi alma dieron la vuelta a todo. Paso mucho tiempo desde que se fue, pero el dolor y rabia guardados, lentamente me marchitaron. No tenía nada contra él, fui yo la no se atrevió a hablarle, la que de lejos miraba, al misterioso y solitario chico en  los descansos, eso paso años atrás; todo iba muy bien, éramos unos niños, nunca entendí el porqué de su partida, tampoco pregunte, seguí con mi vida  pero el recuerdo me atormentaba.
Desde que  presencié su accidente no lo pude olvidar, el chico de ojos avellana que murió delante de mí, era callado pero amable y carismático, eso parecía, solo cruzamos unas únicas y últimas palabras, pero me marco para siempre.
Hasta la noche de mi suicidio lo tuve en mi mente. ¿Por qué lo hice? Ni yo misma lo sé, cargaba cargo y cargare con un peso que no me pertenece.

ANGIE VALENTINA CORDOBA
8ºB        

portal de luz

PORTAL DE LUZ

Descripción: https://encrypted-tbn0.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcQ1wnSUlebLrdGDop5zDeUmRBUCw9orDLCK-jr18psPif2NPIYLCwEn una hermosa mañana, Mike  paseaba por el parque  cercano a su casa; sus ojos azules miraban el cielo mientras los mechones de su cabello castaño caían alrededor de su frente, tenía tan solo catorce años. Se sentía extraño, observado y amenazado, porque percibía una sombra que se acercaba a él.
De un momento  a otro la presencia desapareció, el aire seguía tenso y el día comenzaba a oscurecer; tal vez solo era su imaginación pero algo estaba mal, algo no encajaba y Mike sabia.
Escuchó un golpe seco a sus espaldas, y al voltear se encontró con algo insólito; había una puerta enfrente de él, demasiado perfecta como si hubiese caído del cielo, era gris, tenía espirales y simplemente emanaba aire enigmático y antiguo; para empeorarlo todo nadie más parecía haber advertido su presencia.
Mike avanzó a paso lento, tal vez estaba inseguro pero trastabilló en ningún momento; sus manos temblaban levemente y sentía el miedo correr por su cuerpo, como lobos hambrientos que devoraban su sensatez cada vez más rápido. Intentó hacer caso omiso de sus instintos y ganas de salir huyendo.
Le gustaba mucho resolver misterios, su curiosidad era su mayor característica y defecto y por lo que no podía resistir la necesidad de abrir aquella puerta; no estaba tan lejos, pero llegar a ella le parecía eterno, como si una fuerza lo empujara en sentido contrario; Cuando estuvo a uno pocos pasos de distancia, todo lo que alejaba  Mike de la puerta desapareció, pero ese mal presentimiento no se fue, había maldad en el aire aunque él no se dio cuenta de ello: Estiró lentamente su mano derecha, estaba a milímetros del pomo negro de la puerta y pese que la mano le sudaba lo tomó sin dudar, al hacerlo sintió  una corriente eléctrica que le recorrió todo el cuerpo. Giró lentamente el pomo hasta que con un sonido metálico la puerta se abrió; una luz salió de ella tan cegadora que Mike no tuvo tiempo de defenderse, unos brazos lo tomaron y él desapareció en medio de la nada.



ANGIE VALENTINA CÓRDOBA